Lo peor
de los pies,
de los pies,
es cuando no,
no,
sientes,
lo que sientes,
ni lo que ves.
Y al ver el mundo,
el planeta del revés,
que sin saber,
vuelve a pintar,
y a soñar,
y a dibujar,
a delinear,
a volver
a cabecear,
y sin miedo,
volver a escuchar las olas del mar.
Porque te quiero,
y entre mis dedos,
volveré a sentir,
y a vivir,
todo aquello,
todo aquello
que no me hace un infeliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario