Mientras los últimos pertrechos llegan a la nave, Vasco de Gama contempla el mar que baña las playas de Lisboa, y ante de sí se extiende el mar.
El mar que conquistaron los marineros portugueses, en África, en la India, y hasta en el Lejano Oriente, hombres intrépidos, aventureros, alzaron la bandera del Reino más allá de los mares.
Con fuerza y honor, así fue Portugal construyendo un gran imperio,
De un pequeño país se
lzaron decenas.
A lo largo del ancho mundo.
El Imperio del Brasil, Angola, Mozambique, Gao y Macao.
Navegando con el corazón encendido y la mirada dispuesta....
El navegante portugués llega hoy a un nuevo puerto, y sus hermanos de España sólo le desean lo mejor.
Porque nunca fuisteis malos, y mira que podíais haberlo hecho.
Portugal es un regalo del Cielo, como su gente, como Lucía, Jacinto y Francisco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario