martes, 30 de abril de 2019

El Camino Tenebroso

Cuando caminas
con el alma abierta
y te adentras
en Tierra desierta,
por esa vereda
siniestra,
que serpentea,
una vez pasado el río,
la montaña
donde mora
el eterno frío.
Y es en ese oscuro
sendero,
donde tu corazón
se encoge al sentir,
al palpitar
la inmensidad del
vacío.

De la lengua
pierdes el hablar
y de la mirada,
de la mirada
el poder amar.
Cuando cae la noche
puedes escuchar
la macabra sonrisa
del barquero
que hace
a las piedras
temblar
y a tus ojos llorar.

Más allá,
aunque todavía
no alcances ver
el mar,
ya solamente
puedes caminar.
Y así,
con los manos
en los bolsillos
del chaquetón raído,
es cuando,
aprende uno
a soñar.

Y tus ojos,
ya sin nombre,
se encienden
en lo más profundo
del invierno.
Cuando Perséfone
vuelve tu piel
a acariciar,
para volver
a sentir,
a imaginar
un mundo nuevo
que conquistar.

viernes, 26 de abril de 2019

Pelirrojas

Son tus destellos de rojo,
de fuego
iluminado,
y tu
triste semblante,

Se ilumina,
en esas praderas
que las manos
del Sol

reflejan tus ojos.

Como una triste niña,
que espera,
la Esperanza.

Inglaterra se llena
de globos
silenciosos
y de niñas,
de niñas
llenas de besos.

jueves, 11 de abril de 2019

ORDALÍA

Con los ojos cerrados,
como en una nube,
siento,
padezco,
tu silencio.

Y pongo los dedos,
los dedos
en el fuego.

En esta Tierra.

Con las dos manos.
Y los diez dedos.
Y mi corazón,
mi corazón,
se hace pegamento.

El pegamento 
de tus besos.

El ungüento
que,
beso a beso,
y palmo,
palmo,
palmo a palmo
me desvela,
que cuando los abra,
los ojos,
sabré
que estoy despierto.

Para 
de nuevo 
volver
a verte.

Para nunca más
sentirme
un viejo.